Paté de gambas al ajillo: así se hace

Receta ↓ Ángela Solar

¡Este paté de gambas al ajillo es una exquisitez que deleitará tus sentidos! Con un sabor intenso y aromático a ajo, esta receta es muy fácil y rápida de hacer, ¡perfecta para cuando tienes invitados inesperados!

Ingredientes necesarios

Para preparar este delicioso paté de gambas al ajillo, vas a necesitar los siguientes ingredientes:

• Gambas - 200 g. Yo prefiero usar gambas frescas, pero si no tienes tiempo, también puedes usar gambas congeladas.
• Ajo - 3 dientes. El ajo le da ese toque especial al paté, así que no escatimes en él.
• Aceite de oliva virgen extra - 125 ml. El aceite de oliva virgen extra le da un sabor increíble al paté, pero si quieres reducir las calorías, puedes usar aceite de oliva ligero.
• Perejil fresco picado - 1 cucharada. El perejil le da un toque de frescura al paté, pero si no tienes perejil fresco, también puedes usar perejil seco.
• Sal - 1/2 cucharadita. Sazona al gusto, pero ten cuidado de no añadir demasiada sal.
• Pimienta negra - al gusto. La pimienta negra le da un toque de sabor adicional al paté.

Preparación del ajillo

¡Vamos a empezar con la preparación del ajillo, un paso fundamental para conseguir el sabor intenso y aromático de este paté de gambas! Recuerdo cuando mi abuela me enseñó a hacer este plato, y siempre me decía que la clave estaba en el ajillo. Así que vamos a prestar mucha atención a este paso.

Lo primero que necesitamos son unas gambas frescas y de buena calidad. Yo suelo comprarlas en la pescadería de confianza y las elijo una a una para asegurarme de que están en perfectas condiciones.

Una vez en casa, las limpio y las dejo listas para cocinar. Si no tienes tiempo o no encuentras gambas frescas, también puedes usar gambas congeladas, pero asegúrate de descongelarlas completamente antes de cocinarlas.

El aceite de oliva virgen extra y el ajo son los ingredientes estrella del ajillo. Yo suelo usar entre 3 y 4 dientes de ajo por cada 200 g de gambas, pero esto depende del gusto de cada uno.

Lo importante es que el ajo quede bien pochado en el aceite para que suelte todo su sabor. Si no te gusta el ajo demasiado fuerte, puedes quitarle el germen antes de pocharlo.

Una vez que tenemos el aceite y el ajo listos, añadimos las gambas y las cocinamos a fuego medio durante unos minutos, hasta que estén bien doradas y crujientes. ¡Este es el momento perfecto para añadir un poco de perejil fresco picado y retirar el ajillo del fuego! 

Proceso de elaboración del paté

Lo primero que debemos hacer es triturar las gambas junto con el resto de ingredientes en un procesador de alimentos. Yo suelo usar una licuadora, pero si tienes un procesador de alimentos, ¡mucho mejor!

Una vez que tengamos una mezcla homogénea, es el momento de ajustar la textura y el sazón del paté. Si te gusta más espeso, puedes añadir un poco más de pan rallado. Yo siempre pruebo el paté antes de añadir la sal y la pimienta, para asegurarme de que está bien sazonado.

Por último, debemos refrigerar el paté durante al menos 2 horas para que los sabores se intensifiquen. ¡Este paso es crucial para obtener un paté de gambas al ajillo con un sabor intenso y delicioso!

Y ya está, ¡nuestro paté de gambas al ajillo está listo para servir! Lo suelo servir con pan tostado o crackers, pero también queda delicioso con verduras crudas.